En varias ocasiones hemos hablado de la posibilidad cada vez más cercana de leer la mente
(por ejemplo aquí). Estos avances se basan casi todos en el uso de la resonancia
magnética funcional (fMRI). Sin embargo, una línea de investigación
paralela ha intentado hacer uso de las señales eléctricas que generan el encefalograma y, últimamente, de
los conocimientos sobre el campo eléctrico del cerebro (más
detalles aquí ). Un equipo de investigadores encabezado por Xavier O'Heary, del
Instituo de Tecnología de Massachusetts (MIT, EE.UU.), en
colaboración con el NSRDEC
del United States Army Soldier Systems Center, ha presentado
un dispositivo capaz de “leer” el pensamiento verbal de una
persona y transmitirlo por radio a un dispositivo similar de manera
que otra persona pueda “escuchar” lo que ha “dicho”. La
presentación tuvo lugar durante la New Combat Technologies
Conference que se celebró el pasado día 22 de diciembre en Phoenix
(EE.UU.). Una descripción de los aspectos neurocientíficos aparece
en Science.
La actividad eléctrica del cerebro es
capaz de afectar a un sistema magnético de tal manera que se generan
corrientes externas que son emitibles por radio. El dispositivo lee
la actividad cerebral de esta manera y la transmite por radio a otro
elemento similar. En éste el proceso se invierte, convirtiéndose la
señal eléctrica en magnética que afecta al campo del cerebro de
tal manera que el sujeto “oye”. El sistema funciona por turnos y
solamente para información verbal.
En los experimentos descritos en la
carta enviada a Science, 7 parejas de sujetos fueron capaces
de comunicarse mentalmente estando separados más de un kilómetro.
En un primer experimento, los sujetos emisores tenían que leer
mentalmente un listado de 50 palabras inconexas; en este caso los
receptores “oyeron” menos de la mitad. Sin embargo, en un segundo
experimento, en el que se usaron esas mismas palabras pero formando
frases gramaticalmente correctas y con sentido, los receptores
“oyeron” el 87% de las frases correctamente. Finalmente, en un
tercer experimento, en el que los emisores leían al azar 20 de 100
frases posibles, previamente conocidas por los receptores, el índice
de acierto fue del 100%.
Pero no todo es tan fácil. Los
dispositivos tuvieron que ajustarse físicamente a cada sujeto y
calibrarse de forma personalizada. Estas características, unidas a
las demás, harán que el primer uso sea en los equipos de fuerzas
especiales (Delta, SEALS, etc.) una vez se solucione el principal
inconveniente, el peso, algo más de kilo y medio en los prototipos.
Independientemente del uso militar, estos dispositivos abren todo un mundo de posibilidades tanto para el
estudio del cerebro como para el uso clínico, en pacientes con
imposibilidad de comunicarse de otra forma. El futuro ya está aquí.
Referencia:
O´Heary,
X., McMillan, J., Hudson, H., Steinberg, M., Eisenstein, R.,
Pampanella, L., Cape, J., Monnard, P., & Boncella, J. (2011).
Electromagnetic Transduction and Long Distance Radio Communication of the Verbal
Activity of the Brain
DOI: 10.1039/hoy2812d
He leído un artículo de la Universidad de Nebraska que hace referencia al artículo que enlazas como fuente, en el que son escépticos respecto a la viabilidad debido al gran espectro electromagnético al que estamos expuestos hoy en dia.
ResponderEliminarfuente: http://www.unl.edu/site/public/papers/20111228.pdf
Si no fuera por el doi... Excelente!
ResponderEliminarExperientia docet stultos sed necat.
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