¿Cuál era el medio de propaganda más potente del hitlerismo? ¿Eran los discursos de Hitler y de Goebbels, sus declaraciones sobre este o aquel tema, su agitación contra el judaísmo, contra el bolchevismo?[…]No, el efecto más potente no lo conseguían ni los discursos, ni los artículos, ni las octavillas, ni los carteles, ni las banderas, no lo conseguía nada que se captase mediante el pensamiento o el sentimiento conscientes.El nazismo se introducía más bien en la carne y en la sangre de las masas a través de palabras aisladas, de expresiones, de formas sintácticas que imponía repitiéndolas millones de veces y que eran adoptadas de forma mecánica e inconsciente.
Esto escribía Victor Kemplerer, un
filólogo judío que sobrevivió en Dresde (Alemania) al terror nazi,
en “LTI: la lengua del Tercer Reich” publicado en 1947.
Traducción de Adan Kovacsics.
Y esto es lo que está pasando con la
expresión “partícula de dios” aplicada al bosón de Higgs y al
uso oportunista que de esta expresión publicitaria, infundada y
propagada por periodistas papanatas, están haciendo religiosos de
todo tipo, sin entender de qué hablan, pero arrimando el ascua a su
sardina de forma interesada.
Sabiendo que el nombre “partícula de
dios” no es más que el título de un libro de divulgación
científica y que lo colocó un editor con visión comercial sin que
hubiese otro fundamento para ello, su uso extendido, repetido y
torticero sólo tiene fines propagandísticos y revelan, no un
interés en la verdad, sino en “ganar”.
Veamos a título de ejemplo las
declaraciones del portavoz de la Conferencia Episcopal Española que
extraigo de aquí y su traducción:
- "Es bienvenido que se hable de Dios en la física" porque demuestra que "cuando el ser humano busca el origen de las cosas no puede menos que hablar de Dios"
- Tras reconocer su desconocimiento sobre la naturaleza de esta teórica partícula, Martínez Camino ha asegurado que "llama la atención que, al menos en el lenguaje divulgativo, físicos y cosmólogos hablen mucho de Dios".
- "Nos viene bien que se hable de Dios, del origen del por qué existe algo. A esa pregunta, la física nunca podrá dar respuesta del todo", ya que "la física no tiene medios específicos para escuchar a Dios", ha dicho.
- Así, ha explicado que la física puede dar respuestas sobre "las cosas que se puede medir y pesar, y el amor no se puede medir y pesar, por eso no es objetivo de la física". […] "Y el amor infinito del que todo procede tampoco es objeto de la física, sin embargo esa es la razón de que existe algo. Dios es amor y ha sacado de la nada todas las cosas. Por amor", ha concluido.
El punto 1 es una falsedad, así de claro. En la
física no se habla de la “partícula de dios”, se habla del
bosón de Higgs. Es en los medios de comunicación sin rigor, en los
que el titular lo es todo, donde se habla de partícula de dios. El
portavoz de la misma Iglesia que acusa a los medios de distorsionarsu imagen
ahora no tiene empacho en tomar como cierta la imagen que dan los
medios generalistas de un acontecimiento complejo que, en la mayoría
de los casos, les supera.
El punto 2 es una muestra clara del
importante uso manipulativo de las palabras. No entiende, pero
aprovecha la oportunidad y la usa, y se apoya en el punto 1 para
darle proyección.
El punto 3 ya es puramente apologético
y posiciona a la fe, primero, como conocimiento de la realidad y,
segundo, como medio de conocimiento superior al proporcionado por las
ciencias físicas. Hasta aquí es compatible con cualquier creencia
religiosa.
El punto 4 es doctrinal y establece que
la fe auténtica es la cristiana por la definición del hecho
diferencial de su dios.
La lógica propagandística del
portavoz es digna de Goebbels, que era un nazi asqueroso, pero
buenísimo en su trabajo. No influirá en una persona formada, pero
sí llegará a una mayoría que verá reafirmadas sus creencias.
La visión del mundo tras los creyentes
monoteístas en general (dios el artesano), y que rezuma en las
declaraciones del portavoz, la explica estupendamente la directora
del máster en bioética de la Universidad Católica de Ávila en
esta mini entrevista.
En la guerra por el conocimiento que se
viene librando desde el origen de los tiempos, el descubrimiento de
una partícula compatible con el bosón de Higgs puede estar
resultando, con la colaboración imprescindible de periodistas
incompetentes, una batalla propagandística perdida frente a los que
lo saben todo porque viene en su libro.
Para finalizar no me resisto a citar de
nuevo a Kemplerer:
Pero el lenguaje no solo crea y piensa por mi, sino que guía a la vez más emociones, dirige mi personalidad psíquica, tanto más cuanto mayores son la naturalidad y la inconsciencia con que me entrego a él. […] Las palabras pueden actuar como dosis ínfimas de arsénico: uno las traga sin darse cuenta, parecen no surtir efecto alguno, y al cabo de un tiempo se produce el efecto tóxico.
En la Era de la información hay que saber "bucear". Para ejercer correctamente este deporte es necesario estar preparado con un buen equipo de "buceo". Muchos se ahogarán entre palabras necias, que transformarán su curiosidad en ignorancia.
ResponderEliminar"La formación antes que la información"
Me ha encantado este artículo, sinceramente. De verdad que no entiendo cómo la Iglesia puede llegar a manipular de esta manera... Ya me repatea bastante que el bosón de Higgs se haya bautizado con lo de la partícula de Dios por culpa de un editor mojigato y comercial, como para que encima el portavoz de la Episcopal suelte su "discursito" con el que pretende únicamente ganar, como bien has dicho.
ResponderEliminarLo repito. Nuevo: me ha encantado, así que gracias por compartir esto.
Saludos.
Yo no sé muy bien qué tienes contra los curas, los tratas como si hubieran violado a tu madre y hubieran tirado a tu padre por la ventana. Muy propio de los nazis era esa cosa de tomar frases bastante inocentes de sus enemigos y aplicarles los adjetivos más terroríficos. Por ejemplo, eso haces tú con el punto dos hablando de no sé qué hostias de manipulacion y horrorosas intenciones a una frase de lo más corriente el cura ese.
ResponderEliminarLo impresionante es que aplicas técnicas nazis para acusar de nazi.
Por cierto, toma cualquier diatriba nazi de la época contra los católicos y verás cómo se parece a la tuya.
Los matacuras os lo tendríais que mirar, lo vuestro no es normal. Menuda que le has montado al cura ese a cuenta de una entrevista en la que el pobre tío ni entra ni sale en la denominación partícula de Dios.
Joder, es que la vuelvo a leer y me pareces cada vez más nazi, más sin matizaciones.
ResponderEliminarEs que conozco al puto cura del que hablas y lo que dices es una mentira de cojones.
A ti te pasa algo en la cabeza, no se puede acumular más odio contra menos frase.
Espero que el cura que violó a tu hermana esté en la cárcel y que Dios te conceda consuelo.
Quien es este subnormal???alguien lo tenía que decir...
EliminarQuien es este subnormal???alguien lo tenía que decir...
EliminarSólo tengo que decir
ResponderEliminar«Haters gonna hate»
Gran artículo. Totalmente de acuerdo.
Este miniensayo es magnífico, y lo es por más de una razón. En primer lugar porque trata de un mecanismo del que normalmente no nos percatamos pero de gran efectividad como mecanismo de manipulación. Y es que las palabras no son meros vehículos de información y conviene ser conscientes de ello. Y en segundo lugar, porque deben desenmascararse falacias retorcidas como la que expresa en su intervención el portavoz de los obispos españoles.
ResponderEliminarLos comentarios zafios y ofensivos que he visto más arriba solo indican que la hipótesis de que entre nosotros convive más de una especie hominina merece cierto crédito.
Enhorabuena, César.
Un artículo de sobresaliente éste de la mal llamada partícula de "dios". Gracias una vez más, maestro.
ResponderEliminarEs el típico caso de arrimar el ascua a su sardina, porque...
ResponderEliminar"-.¿Por qué se le llama la Partícula de dios?
Es una anécdota muy curiosa. En los años 90 , Leo Lederman, Premio Nobel, decidió escribir un libro sobre divulgación de la física de partículas. .En su texto Lederman se refería al bosón como “The Goddamn Particle” ( La partícula puñetera) por lo difícil que resultaba detectarla.
El editor del libro decidió cambiar el término “The Goddamn Particle” por “The God Particle” y así se convirtió en la partícula de dios…"
El anónimo de "los tratas como si hubieran violado a tu madre" etc dijo lo mismo en mi blog por otro tema similar. Usa el mismo comentario para todo lo que hiere su fina piel. Eso sí, argumentos cero, por supuesto. Buen post.
ResponderEliminarMagnífico, César. Gracias por enseñarnos a vivir con los ojos abiertos.
ResponderEliminarSaludos
Hola,
ResponderEliminarSi se me permiten algunas matizaciones...
El punto 1 es falso claramente, algo que se intenta arreglar con poco éxito en el 2. Está claro que la Iglesia tiene (tenemos) que mejorar mucho em comunicación. Discrepo en los puntos 3 y 4 no solo con el comunicador sino también con el autor del post. El conocimiento científico es independiente del que aporta la fe, eso está reconocido desde el siglo XIII por la Iglesia. Se ocupan de materias distintas y cuando coinciden en el tema, aportan visiones distintas (que no quiere decir contradictorias: salvando distancias sería como las diferencias entre médicos e ingenieros en la investigación biomédica). Evidentemente no es un ejemplo perfecto pero me parece que sirve para ilustrar.
Lo que está claro es que la Iglesia no se ha inventado el nombrecito, aunque reconozco que no está bien la apropiación, pero considero que está igual de mal y de manipulación de la realidad equipararlo a la propaganda nazi
Hay un par de detalles más en el tema de la "partícula de dios". El primero que la graducción correcta y que figura en la edición española es "La Partícula divina". El segundo es que en ningún sitio se dice que sea el dios cristiano y ni siquiera se dice que sea el único dios. El artículo me parece una reflexión excelente. La jerarquía eclesiástica española se retrata en sus declaraciones como lo que es, alquien ajeno a la realidad y a la ciencia (i.e. profundamente ignorante). No he oído tantas sandeces en otros países...
ResponderEliminarClaro, "la partícula de Dios", que no especifica a qué dios se refriere, os ofende y necesitáis escribir una gigantesca Ley de Godwin para decirlo.
ResponderEliminarSin embargo, los nombres de los planetas y los días de la semana, que vienen directamente de deidades greco-romanas, no os ofenden.
La hipocresía de algunos ateos es enfermiza, y luego hablan de los religiosos.
El hecho de que algunos ignorantes lo interpreten como una alegoría a Dios es tan patético como el hecho de que algunos ateos se ofendan por ello.
El sobrenombre de esta partícula tiene una historia muy interesante, que llegó para quedarse; os guste o no.
Me la suda tela, ni el boson de Higgs ni Dios van a influir lo más mínimo en mi vida. Y quiero añadir que, aunque se me tilde de demagogo, tenemos muchas cosas pendientes como para tirar recursos buscando partículas, ya sean de Dios, de Higgs o de cualquier pelagatos ... malaria, hambre, sed, cáncer, me da vergüenza ajena seguir
ResponderEliminarBuenas, no me he leido los comentarios, pero aclarar que lo de particula de dios viene, que en un primer momento cuando se buscaba el boson en cuestion se uso un detector que no llegaba a los 125 Gev pero se quedo al borde de la evidencia, de ahi que uno de los fisicos encargados la denomino , "god damn particle" pero como en el paper que se publico no quedaba bien poner maldita particula, el editor omitio el damn.
ResponderEliminarSaludos
¿Y qué esperáis de la gente que inventó el timo de "Dios me ha dicho que te diga que me tienes que dar tu dinero"?
ResponderEliminarAl Anónimo que critica el buscar partículas...
ResponderEliminar1.- El CERN inventó la web, que estés comentando aquí demuestra que ya ha afectado tu vida
2.- Has venido a comentar sobre Dios, por tanto también ha afectado tu vida
Detalles aparte serían el 350% de beneficio directo aportado a la sociedad por las inversiones del CERN, o los impuestos obligatorios y regalos cedidos por tu país, en tu nombre, a la Iglesia.
Prejuicios. Si se hubiese llamado "la partícula de Thor", o "la partícula de Zeus", o "la partícula de Júpiter", o "la partícula de Ra", no habría artículo. Que yo sepa, no se llama "la partícula de Yahvé" tampoco. Nadie se queja de la palabra "domingo" (día del Señor), por manipulatoria, etc. En Inglaterra, por ejemplo, "Sunday". No vale. (soy ateo, por cierto), así que se utiliza la palabra "dios" con la partícula como sinónimo de "del copón" "de la ostia", etc. Llevo años leyendo libros de la partícula de Higgs y así lo entiendo yo y mucha gente...
ResponderEliminarAunque necesario, es bastante frustrante pelear contra el pensamiento mágico de la masa. La única forma de que un artículo como el tuyo cale en esta sociedad, sería elevando el nivel cultural, pero eso no va a suceder y las condiciones actuales que impone la casta neofranquista que nos gobierna a la educación son demoledoras. Cualquier votante medio de este sistema te hablará con un dominio espectacular sobre la roja o la Esteban, no le preguntes sobre fermiones. Mientras tengan un dios estulto, simplón y completamente accesible sin pensar, no necesitan preguntarse sobre un ecosistema que no vislumbran ni les sirve de nada. El verdadero dios del conocimiento en este casposo país es la conferencia episcopal, la caterva de terratenientes que votan cada 4 años, Telemadrid y Telecinco.
ResponderEliminarLo único que se me ocurre a estas alturas es reírme en la cara de cualquier analfabestia cuando se está hablando de algo que le supera. No hay excusa, todos hemos tenido las mismas posibilidades de acceder a la enseñanza obligatoria y secundaria y la información no se esconde en monasterios, está accesible para cualquiera. No hay excusa.
Excelente entrada, César. Llevo unos días dándole vueltas a esta misma idea y no podría haberlo descrito mejor. Vuelvo a comprobar que compartimos intereses, tengo varios libros de Klemperer y me parece que su visión es de lo mejor que se ha publicado sobre la Alemania de los años treinta.
ResponderEliminarMuy buen artículo: necesario, claro y perfectamente explicado. Toda la gente de ciencia suscribe lo que tú estás diciendo. Es increíble que ante tamaño descubrimiento estos fanáticos usen las técnicas de propaganda nazi para sacar tajada. No lo podemos tolerar.
ResponderEliminarhttp://amazings.es/2012/07/04/dilo-otra-vez/
ResponderEliminarUn punto de vista en la misma línea: http://www.diariocordoba.com/noticias/opinion/una-metafora-punetera_728563.html y en http://casimirobarbado.blogspot.com.es/2012/07/una-metafora-punetera.html
ResponderEliminar...Y olé de nuevo, señor. Me quito el sombrero.
ResponderEliminarMe alegra que queden voces afines en lo que sí pienso que es, cada vez más, una batalla perdida en el mundo en el que la opinión desinformada es ley...